miércoles, 18 de febrero de 2009

Siguendo la corriente.

Un 14 de febrero completamente macilento y comercial. Bien, llegando hacia el aula 19, estando afuera, me detengo a observar el día, con todas estas personas con cosas en la mano, chocolates, flores, cartas etc. Un día completamente comercial; cuando apenas un día anterior; el panorama era completamente diferente, colores grises, opacos y la mayoría de las personas tenía caras largas, supongo que por la lluvia, y la mayoría de las tiendas abarrotadas por locos que buscan el mejor regalo para expresar su amor.
En el 14 es “raro” ver a una persona que no tenga algún obsequio de los amigos o de su novio.
En cambio cualquier otro día, como un 17 de marzo (o cualquier otro), una persona con globos exageradamente grandes, con rosas (que solo justifican las mentiras piadosas) chocolates, cartas etc. Todos lo observan y le dice: -¡Este wey se le perdió el 14! –
otros dicen: -Si que esta enamorado-. ¡Vaya! Al punto que voy es que se me hace verdaderamente patético agarrar un día en especial para decirle a esa persona cuanto lo quieres y cuanto lo amas. Cuando el amor se debe de alimentar día con día.
Todo lo que se hace el 14 de febrero, como quien dice ya es una “costumbre” que todos hagan eso; en cambio un día cualquiera le das todo eso a tu pareja y te aseguro que ese día será completamente inolvidable, fuera de lo común y que ambos tendrán en su mente gravada esa fecha importante; sin que los “comerciales” fastidien con una fecha que todos la saben de memoria…

No es que este en contra de ese día, ni mucho menos me tomen por amargada; pues te aseguro que puedo ser la mas romántica y cursi si se me da la gana.


Mildred Portugal